Caracoles Fáciles

Construcción - Inicio - Funcionamiento -Asesoramiento y Posterior Seguimiento de Granjas de Caracoles

Antonio Villalonga

Preámbulo
Este trabajo no es un tratado científico o teórico sobre morfología, anatomía, patología u otros temas sin duda de interés para algunos, que nada podrá añadir a los muchos libros, artículos y alguna que otra tesis doctoral. Todo este material bibliográfico es posible encontrarlo a disposición fácil en bibliotecas, librerías y en páginas Web de Internet.

Tal como en tiempos anteriores se puso de moda ganar dinero fácil en la cría de chinchillas, gusanos californianos y otros eventos piramidales, hoy, si bien el tema es recurrente, se ha disparado la propaganda de captación de ilusos e ignorantes en esta materia. Si a usted le resulta sugestivo montar una granja, puede seguir uno de los tres caminos de los que actualmente hay en liza: uno, es lanzarse por la brava. Otro, seguir un curso de helicicultura en alguna de las muchas escuelas de esta materia. Éstas, que empiezan a proliferar como hongos, mas que los cursos en sí, en lo que más interés y empeño ponen, es en motivarle para que arranque fuerte de su mano, porqué ellas por si mismas o por negocios paralelos, lo que les renta son las sustanciosas ventas de material necesario y adecuado. La tercera, que parece ser la más segura, es imitar los pasos de alguna granja de la que usted sepa con certeza que es económicamente rentable. Como mínimo, saber si han sacado quilos de caracoles a la venta. De todas las que he conocido -y son muchas-, no me constan ventas importantes. Como mucho, siempre han sacado menos quilos de los que han vaciado como reproductores. Pero como además de estas míseras ventas les queda un resto de caracolillos pequeñines que serán los que podrán continuar el próximo ciclo, ya se consideran que han alcanzado un cierto éxito que les legitimiza para hacer un nuevo intento.

Es mas que probable caer en manos de desaprensivos cuya finalidad no es la de que usted adquiera unos conocimientos que den resultado en la práctica, sino en sacarle su dinero, frecuentemente en buena cantidad.

La gran mayoría de emprendedores en esta fácil y lucrativa actividad, desisten del empeño en un par de años y los que continúan con tozudez, se consuelan con la esperanza de que el año próximo será el del despegue, porqué ahora ya dominan todos los aspectos que antes eran desconocidos o negativos.

Encarrilarse exitosamente en una explotación de este tipo, de hecho no es difícil. Es parecido a lo que se cuenta del huevo de colón, tras descubrir América.

Con la autoridad que me da la perseverancia de muchos años de práctica en el campo de los viveros, granjas y en la compraventa o acopiador de caracoles como medio de ganarme la vida, veo llegado el momento de divulgar mis conocimientos, al estar ya jubilado. No pretendo venderle ningún material necesario para ninguna granja. Todo lo que precise, se lo venderán en comercios diversos en los que podrá elegir y comparar precios. ¡¡¡A ellos se debe dirigir!!!.

No obstante todo lo dicho, la gran mayoría de estas instalaciones al aire libre están técnicamente bastante bien construidas y es posible hacer pequeñas remodelaciones para que se adapten a las necesidades reales. La dificultad mayor, reside en el hecho de que sus propietarios ya están resquemados de haber perdido tanto tiempo y dinero y es lógico que “estén de vuelta”. Ahora ya es posible encontrar buena parte del material de segunda mano a muy buen precio.

Este divulgación va dirigida a los territorios del hemisferio Norte. Si alguien del hemisferio Sur está interesado en llevarla a la práctica, deberá invertir los términos referentes a las estaciones del año, o contra estación.

Reclamos
Se ha hecho frecuente en medios de comunicación de toda índole, encontrar encabezamientos sugestivos para llamar la atención de lo que muestran como una economía alternativa o la panacea de la maltrecha economía agraria de algunos países, sobre todo sudamericanos. El tenor de estos enunciados se puede encontrar de esta forma:

CARACOLES......; EXPLOTACIONES HELICÍCOLAS.....; EXPLOTACIÓN DE GRANJAS DE CARACOLES.....; HELICICULTURA RENTABLE.....; CRÍA Y ENGORDE DE CARACOLES...; INSTALACIONES HELICÍCOLAS....; CURSOS DE HELICICULTURA.....; ASOCIACIÓN DE HELICICULTORES.....; HELIX ASPERSA....; PETIT GRIS.....; GASTRONOMÍA DEL CARACOL.....; TODO SOBRE CARACOLES.....; INTERÉS DE LOS CARACOLES.....; HELICICULTURA RENTABLE.....; COMERCIO DE CARACOLES......; CARACOLES REPRODUCTORES .....; ELICICULTURA IN ITALIA.....; HELICICULTURA EN ESPAÑA.....; HELICICULTURA EN FRANCIA.....; HELICICULTURA EN ARGENTINA.....; ELEVAGE DE L’ESCARGOT.....; ALEVINES DE CARACOL.....; CAVIAR DE CARACOLES....; PATÉ D´ESCARGOTS....; MEDICAMENTOS DE CARACOL.....; INSTITUTOS DE HELICICULTURA.....; ESCUELAS DE HELICICULTURA.....; EXPLOTACIONES EXTENSIVAS DE CARACOLES.....; EXPLOTACIONES INTENSIVAS DE CARACOLES.....; WEBS DE HELICICULTURA.....; WEBS DE CARACOLES......; FOROS DE HELICICULTURA....; SIMPOSIOS DE HELICICULTURA....; FIESTA DEL CARACOL.....; FERIA DEL CARACOL.....; MERCADO DEL CARACOL.....; CURSO DE HELICICULTURA....; SEMINARIOS DE HELICICULTURA...; CONFERENCIA DE HELICICULTURA.....; L’ESCARGOT DU.....; ALIMENTOS PARA CARACOLES.....;TESIS HELICÍCOLAS.....; MATERIAL PARA HELICICULTURA.....; RENTABILIDAD DE LOS CARACOLES.....; IL MONDO DE LE LUMACHE .....; CHIOCCIOLE IN ALLEVAMENTO.....; ALLEVAMENTO DI LUMACHE.....; ELICICOLTURA.....; LUMACHE.....; CHIOCCIOLE.....; ESCARGOTS....; HÉLICICULTURE....; CULTURE OF EDIBLE SNAILS....;SNAIL FARMS.....; ELÉVAGE D’ESCARGOTS.....; ESCARGOTS & HÉLICICULTURE.....; SNAILCULTURE.....; L’HÉLICICULTURE.....; GUIDE OF HELICICULTURE.....; CULTURE OF SNAILS.....; RESEARCH AND DEVELOPMENT OF HELICICULTURE.....; HÉLICICULTURE EN FRANCE.....; y un largo etc.

Generalidades
Personalmente, empecé a familiarizarme con el mundo de los caracoles alrededor del año 1945, cuando en mi pueblo natal casi todo el mundo tenia una huerta de regadío ya propia como en alquiler. Las divisorias de parcelas eran paredes de piedra sin cementar y en las tierras de secano abundaban los olivos centenarios, muchos bancales de piedras en parcelas pequeñas solo aptas para trabajar con animales, que unido a una pluviometría satisfactoria, era ideal para que desarrollaran abundantes y buenos caracoles. En aquel tiempo no existían los venenos para su exterminio y si bien es verdad que distribuyendo sal gorda en las márgenes o en los caminos también se eliminaban, lo que más se utilizaba eran los patos, que se los comían con gran fruición. Pero como en el mercado se nos compraban los terminados o adultos, se hacía una clasificación: los pequeños e inmaduros eran para crecimiento de los patos caseros y los comerciales para vender y para comer nosotros en familia.

De este mercado primero comarcal, los tratantes de pollería, ajos, setas y caracoles junto con huevos, aves y otros animales menores cooperaban en el abastecimiento a la ciudad de Barcelona y área de influencia.

Con el paso del tiempo y el aumento del nivel de vida se fueron modificando las condiciones. En lo que antaño eran las mejores tierras de regadío hoy están los edificios más confortables y la urbanización ha hecho desaparecer el clásico regadío, aparte de que las aguas se utilizan ya casi solamente para dar movilidad al sistema de alcantarillado.

Estoy seguro que en cualquier pueblo de Cataluña que años atrás era de zona regable al modo tradicional, más de uno podría escribir algo similar a todo este relato.

No obstante, el comercio de caracoles y su gastronomía eran bastante reducidos. Era mas bien un manjar de baja categoría. Actualmente las tornas han cambiado. Comer caracoles en casi todos los restaurantes, es de lo más normal en cualquier provincia catalana y adquirirlos cocinados, es como comprar pollo asado para comer en casa. Con lo cual, resulta que actualmente hay un déficit grande de materia prima en todo el país. Primeramente se paliaba adquiriéndolos en otras zonas de España en donde no era costumbre comerlos. Pero debido a que no se han respetado las crías y a que cuando caen cuatro gotas sobra gente para buscarlos, la reducción de estos moluscos ha sido bastante drástica. Otras causas de la actual escasez son por el uso de herbicidas, que si bien no matan a los caracoles, les eliminan su alimentación en épocas que la precisan. Además hay pocas aves rapaces diurnas capaces de equilibrar a las depredadoras y muchas vedas para favorecer la proliferación de cualquier tipo de pájaros. Cualquier tipo de ave, es y debe considerarse como depredadora, incluidas las rapaces nocturnas, que en su conjunto, unas y otras son las que más esquilman, a la par de otros animales de bosque que también proliferan demasiado, tales como los zorros, tejones, erizos, jabalís, musarañas, mustélidos, etc. y las ratas. Y no digamos del daño que causa el vertido de purines de las granjas en los campos. Quedan las hierbas infectadas y el amoníaco que desprenden es altamente letal. También las parcelas de secano pequeñas en que ha sido posible una concentración, se han agrandado para laborarlas con tractores. Con ello, se han suprimido la gran mayoría de refugios naturales. Olivos con recovecos o sin ellos, ya no existen. Todos estos factores negativos y al hecho de que el consumo ha ido clarísimamente en aumento, ha llevado a que hoy se importen de cualquier país y en competencia con Francia e Italia, no siempre en las cantidades que se precisan. Estos caracoles que se importan, aunque usted alguna vez vea descargar un trailer entero, son totalmente de recogida campera, por mas que los vea perfectamente unificados en cajas y por quilos. Es el producto del trabajo de mucha gente económicamente marginal y de otra que ya está jubilada.

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La Mejor Elección

Aunque en unas zonas determinadas prefieren unas especies y variedades concretas, en general y por gran mayoría diferencial, los mas apreciados son los llamados caracol de huerta en España y “Petit gris” en Francia (género Helix, especie aspersa, variedad normal), cuyo peso oscila entre 5 y 17 g y el diámetro de la concha varía entre 24 y 36 mm. Yo personalmente, siempre he trabajado con esta variedad y da buenos resultados. Al final de temporada, al hacer la clasificación me sale un 70% de terminados o 1ª, un17% de 2ª y un 13% de alevines. Con estos alevines, me sobran para reiniciar la siguiente temporada. Hay que tener en cuenta que las variedades pueden ser: enanas, normales, grandes y máxima o gigante. Esta última puede tener un diámetro mayor de 45 mm suele darse en plantaciones de árboles y tiene la carne del manto de color negruzco. Solamente es apreciada en la comunidad de Madrid.

La variedad enana, si es de cáscara dura, tiene un precio superior por kilo y en este peso entran de entre 200 a 230 unidades, como media.

En la variedad normal entran desde 160 a 200 piezas por kilo. Aunque el precio es algo menor, es la más rentable.

Si en nuestra zona los hay de la variedad normal, es mejor empezar con estos recogiéndoselos usted mismo, ya que estarán mejor adaptados. La parte negativa de este proceder, es que si empezamos al inicio de la primavera con 10 quilos de reproductores adultos dentro de un área de 100 m cuadrados, solo habremos obtenido los reproductores para el año próximo, sin ninguna producción para vender en el presente. Si esparcimos 20 quilos de alevines de un diámetro no mayor de 10 mm, aseguraremos una venta cercana a los 200 k y tendremos alevines propios quizá no suficientes para el siguiente año. El desembolso monetario podrá ser ligeramente superior, pero el resultado a nuestro favor es muy desproporcionado. No caer en la trampa de comprar reproductores selectos de “Italia” u otro sitio en el cual son “especiales”. Lo único que tienen de especial es el alto precio.

Hábitat y Calidad de los Caracoles

Los sitios más idóneos para su proliferación, son las zonas de influencia marina, por tener una climatología más húmeda y estable. También en las vegas fluviales y en las nuevas zonas de regadío. En España, donde más abundan es en Galicia y en Asturias. Galicia y en concreto la provincia de Lugo es la de mayor producción. Pero los de La Coruña y especialmente los de la provincia de Pontevedra, son los de peor calidad por ser las tierras pobres en cal y de elevada acidez. En Asturias son algo mejores. Pero los de mejor calidad son los de la vega del río Cinca, seguidos de los procedentes de los regadíos del río Segre en la provincia de Lleida y toda la zona del litoral del Levante.

Explotación al Aire Libre

Las mejores tierras para criar caracoles - aunque no exclusivas -, son las orientadas al mediodía, con ligera pendiente y buen drenaje para evitar encharcamientos de agua. Mejor si son de componente cálcico y tienen abundante cantidad de humus o turba.

Hay numerosos aspectos a tener en cuenta entre el manejo, alimentación, hábitat, materiales, rutina de cuidados, tratamientos, oportunidad, etc., que de desatender uno solo de estos factores puede dar al traste con todo el trabajo y el dinero empleados.

Tamaño de los Reproductores

Tomar como referencia o inicio de ciclo, entre el 21 y el 31 de Marzo y como final entre el 21 y el 31 de Octubre.

Para entendernos mejor, clasificaremos los tamaños en tres categorías mayoritarias. Según sea el estado de desarrollo de estos reproductores o caracoles de inicio de producción, obtendremos un producto final en un sentido o en otro. La primera categoría, la podríamos considerar como reproductor adulto, salido ileso de su primera hibernación o letargo de invierno. Estos, producirán numerosas crías en primavera. Después de la puesta de los huevos, más del 60 % morirán por agotamiento natural, o lo que es lo mismo, de cada 10 quilos de reproductores adultos solo nos quedarán 4 quilos para vender al final de la primavera, que es la época menos idónea para vender. Los alevines nacidos en esta época, no serán adultos al final del ciclo y los pocos que tengan tamaño grande, no serán lo suficientemente endurecidos. Si los guardamos durante el invierno para la siguiente campaña, actuarán exactamente como sus progenitores la gran mayoría. O sea que se aparearán en primavera. Al ser el ciclo completo entre nacimiento y madurez comercial alrededor de un año entero los comerciales de estas hornadas, que pueden ser muchos, los tendremos al igual que los camperos, cuando los precios están más derrumbados al final de la primavera o a principios del verano. Si los respetamos y dejamos para la segunda puesta o de otoño, alrededor de un 80 % de los que quedaron morirán por agotamiento natural, pero dejarán numerosas crías pequeñas al final de la campaña, que no serán suficientes para darnos una producción en la siguiente. Es como la pescadilla que se muerde la cola pero en negativo. Habremos trabajado como mínimo dos años casi en vacío.

La segunda categoría, son caracoles de tamaño medio. Tienen que volver a crecer para obtener el doble de su diámetro. Estos, que serán adultos al final del verano, pondrán muchísima cantidad de huevos en otoño, pero más de su 80 % morirán por agotamiento natural. Si optamos por estos, al final del primer año tendremos una producción irrisoria. No obstante, los nacidos de esta hornada serán los que pueden dar producción al año siguiente y crías suficientes para hacer una continuidad.

La tercera categoría, son alevines menores de 10 mm de diámetro, de propia recolección, o adquiridos a recolectores. Dan producción y crías para hacer una continuidad en el primer año de explotación.

Nunca, caracoles nacidos en primavera serán aptos para vender en el mismo año. El desarrollo de estos, no puede ser completo en los seis meses escasos que tendrán para su actividad vital. Los únicos aptos comercialmente solo serán los que se hayan vaciado en el parque de engorde muy pequeños al inicio de la primavera, pero nacidos del año anterior en el período comprendido entre Agosto y Octubre. Se precisa un año entero y forzosamente tienen que pasar el letargo de invierno ya en guaridas en el parque de cría y engorde o bién guardados en almacén en las mejores condiciones.

Teóricamente, en criaderos montados en locales protegidos tales como invernaderos en los que se tengan instalados dispositivos para el control de la humedad, temperatura, nevulizadores de agua y otros artilugios, se pueden obtener caracoles terminados al final del verano, de los que son nacidos en la primavera del mismo año. Aparte de los resultados negativos que hasta el presente se han cosechado en cuanto a mínima producción, las inversiones de instalación son tan onerosas, que es imposible amortizarlas. Añadido a lo anterior, que no es poco, el trabajo que acarrea este tipo de instalaciones es propio de romanos, por no decir de chinos. Si Vd. quiere tirar el sueldo de tres o cuatro años, láncese por este terraplén.

Consiguientemente, si queremos resultados en el primer año, tendremos que hacer una vaciada de alevines dentro de la granja al principio de la primavera y si la primera recogida la queremos hacer en el año siguiente, habrá que hacer una vaciada de adultos dentro de la granja a mitad del verano, no pudiendo evitar el fuerte estrés producido por las calores de esta época y la necesaria adaptación a la nueva alimentación y ambiente.

Principio de la Parte 2 de 4

La Alimentación

Vegetales

Esta varía en función de su edad. Caracoles pequeñines, comen hierba tierna. Los mayores, prefieren vegetales caducos y hierba cortada de unos días. Unos y otros se regodean con las cortezas. Saber, que hay dos tipos de vegetales a diferenciar: las plantas monocotiledóneas, que son vegetales de hojas largas y estrechas, tales como las gramíneas, que no les apetecen y las dicotiledóneas, que son las de hojas anchas y que les son muy apetecibles. Dentro de estas últimas, no todas las variedades les gustan y si les gustan, no todas les convienen. Las leguminosas son de estas últimas. Suelen producir meteorismo o timpanización (los caracoles se hinchan dentro de la concha) y se produce mortalidad.

Con los vegetales cultivados que crecen dentro de la granja, la alimentación es insuficiente para alimentar a 2 quilos de caracoles por metro cuadrado, con lo cual se tendrá que aportar un plús de fuera y además tendrán que ser más apetitosos que los que tengamos dentro, para que nos los respeten al máximo y podamos disponer todo el período de vegetales para semisombra y despensa de reserva. Estos pueden ser crucíferas (que no sean coles), tipo Capsela bursa pastoris, o de la familia de las ravanáceas o nabos forrajeros y silvestres, malvas, ortigas, hinojo, achicoria y plantas lechosas, de la familia de las compuestas o lechuguinas, que se pueden cortar de campos en barbecho, orillas de caminos y laterales de lechos de ríos, o bien cultivarlos en campo aparte. Contrariamente a lo que la mayoría afirma, las coles son los vegetales menos adecuados para la alimentación de los caracoles ya que el poder nutritivo es casi nulo y da muy mal gusto a la carne del caracol. Hay que cortarlos a todos por encima de la raíz. Si arrancamos las matas con raíz incluida, infectaremos el campo y los caracoles de: nematodos, trematodos, cestodos, etc. y también de limacos o babosas.

Procurar esparcir el vegetal cortado encima del de la plantación sin hacer montones para que se mustie algo y no se pudra. Lo empezarán a comer a los dos días.

Plantación de Vegetación Alimenticia y de Protección

Los vegetales que nos cubrirán todo el ciclo dentro del recinto, son las patacas “Heliantus tuberosus”, llamadas también tupinambos. En las zonas mediterráneas, emergen del terreno una o dos semanas antes de la primera actividad de los caracoles y muere la parte visible unos 20 días después de cesar la actividad de los caracoles. Se plantan sus rizomas a distancias pequeñas entre sí y no nos tendremos de preocuparnos mas de ellas ya que son plantas dominantes y tienden a expandirse por los nuevos rizomas o tubérculos que se esparcen en mucha cantidad bajo tierra cada año.

Solo tendremos que pasar un herbicida no selectivo o de acción total dos veces al año. La primera pasada entre el 1 y el 15 de Noviembre y la segunda entre el 15 y el 28 de Febrero, coincidiendo con la muerte o inactividad de la parte aérea del cultivo, a efectos de eliminar hierbas infestantes no deseadas. Con vientos secantes fríos o calor seca y alta, es inútil dar comida adicional de ninguna clase, ya que no saldrán de la madriguera aunque reguemos.

Buena norma para tener buena sanidad en los caracoles y evitar bajas, es que no les falte nunca comida. Erróneamente, bastante gente “entendida”, asevera que es un animal que come poco. Por los datos que le daré, podrá apreciar por usted mismo. El letargo invernal dura 5 meses exactos y el estival, que puede constar de una o tres paradas, como término medio dura 1 mes. En total, son 6 meses que no comen absolutamente nada. Pero ahora y para hacer una comparación, debe tener bien asumido que 1000 k de caracoles cuando comen, consumen cada día la misma o más cantidad de forraje y pienso que 2 vacas lecheras de 700 k.

Piensos

Los caracoles pueden comer cualquier tipo de piensos que haya en el mercado para la ganadería, siempre que los granulados estén compuestos de harinas molidas muy finas. De lo contrario desperdiciarán gran cantidad por no poder tragarla. Comerán muy bien el pan seco, que es más barato y también la harina de cebada. Pero, el más adecuado es el pienso granulado para lechones de leche. No obstante, habrá que añadirle un 20% de plastificante cálcico. Uno también puede fabricárselo. Con maíz y soja, molidas muy finas. Se harán bien mezcladas, 5 partes de maíz, 1 parte de soja y 3 partes de plastificante cálcico.

Cualquiera que sea el pienso, se distribuirá cada tres días en comedera resguardada de la lluvia y un día después de haber regado a primera hora de la tarde, antes de que salgan los caracoles en su paseo diario.

Desde el día 22 de Septiembre, o sea un mes antes de que los caracoles se recojan en las madrigueras para el letargo invernal, hay que suprimir el pienso ganadero para lechones de primera edad, ya que contiene antibióticos. A partir de esta fecha, solamente se suministrará pienso casero. Aparte de esto, la receta casera aporta cal en más cantidad para fortalecer la cáscara y le saldrá mas barato, aunque empleará más tiempo.

Al hacer la reposición del pienso cada tres días, por el que sobra o por el que falta sabrá que cantidad se debe distribuir. Si se encuentra resto deteriorado o mojado, deberá eliminarlo. Si sopla viento secante o hay alta temperatura con altas presiones, hay que suprimir el pienso.

Papel

Resguardados de la lluvia con fácil acceso de los caracoles o bien en sitio elevado sin contacto con el suelo, habrá que disponer de papel o cartón limpio. Si es de color blanco, mucho mejor. Les ayuda a regular la humedad interna, les aporta celulosa elaborada, favorece la expansión de la concha y tiene otras funciones específicas. Una vez cada dos semanas habrá que sustituirlo por otro limpio, ya que lo dejan totalmente deshilachado y sucio de moco y fango de tanto pasar por arriba y hay que evitar siempre que la comida esté en condiciones de contaminarse.

El cartón se puede también emplear para cazar a los limacos que indudablemente se desarrollarán durante todo el ciclo. Se dispondrán baldosines, azulejos, cuadrados de madera o chapas todos no muy grandes encima del suelo rugoso y cubriendo estos apoyos, una o dos capas de cartón con una piedra encima para evitar la insolación. Este tipo de guaridas son las preferidas de estos moluscos sin concha. Se hace un control de cuando en cuando, se retiran de los fondos y se eliminan.

Que vegetales implantar comocomplemento

Reiterando y complementando lo dicho anteriormente, es importante que los caracoles tengan siempre hierba no solamente de reserva, sino también para sombra y que esta dure todo el ciclo de actividad o vegetación dentro de la granja. El girasol, por lo bien que lo comen podría ser la plantación ideal, aunque es mas corto su ciclo en anterioridad y posterioridad que la actividad temporal de los caracoles. Este tiempo, va desde San José (19 de Marzo), Hasta el día de los Santos Simón y Judas (28 de Octubre.) El ciclo, lo cubre muy bien la pataca o tupinambo descrito anteriormente. También las ortigas, pero son de difícil implantación y tienen obvios inconvenientes. Si no fuera por su lenta implantación, también sería muy adecuada una plantación espesa de higueras. Habría que eliminar las varas cada otoño y dejar retoñar las nuevas. Otra planta muy frecuente en jardines y que es de hoja perenne, es la llamada planta de monasterio, ”Acantus molis”. Todas las plantas que segregan líquidos lechosos son muy aprovechables y permiten varios cortes dentro de su temporada. Todos los tipos de cardos los comen muy bien, incluidas las alcachofas y sus desechos y los nabos forrajeros.

Riegos

Se regará por aspersión o nebulización una vez cada tres días, desde la primera hora de la tarde hasta mitad tarde, para finalizar siempre con ciclo de sol. Así evitaremos los paseos de los caracoles y sus aplastamientos, ya que los caracoles empezarán a salir más tarde de finalizado el trabajo. Hay que sincronizar el riego con la reposición de pienso, que también se hace cada tres días y a la misma hora, pero al siguiente día del riego.

No utilizar aguas de canales o charcas, por estar posiblemente contaminadas, ni aguas potables o de la comunidad, que contienen cloro. Deberá disponer de agua de pozo, que son las de más garantía.

Buena norma sanitaria, es tener instalado un ozonizador que nos inyecte ozono al agua de riego. Esta agua tratada con ozono inmediatamente después de ser absorbida por el terreno, eliminará gran cantidad de protozoos allí presentes. Como que este ozono se descompone de manera rápida, solo habrá actuado en la capa superficial, que es la más crítica, por ser la de contacto con los caracoles. Estos, si se han respetado los horarios de riego, saldrán de la madriguera alrededor de una hora después y no se verán afectados. En la época de deposición de huevos, no hay que adicionar ozono. Aun así, cuando se añade, solo cabría hacerlo una de cada tres veces de riego.

Los aspersores deberán soltar el agua desde fuera de la cuadrícula o parque de explotación a una altura no inferior a tres metros, para asegurar que se riega por encima de la plantación vegetal en etapa de mayor crecimiento. Sobre el número de aspersores y portada de estos, dependerá de la cantidad fija de agua que se pueda disponer y si se tienen que desplazarse o si es posible instalarlos fijos. Para esto es mejor asesorarse de un servicio técnico local para no errar. Hay que regar en cantidad suficiente para que la plantación, que es muy ávida de agua, no sufra en su normal desarrollo. Descartar aspersores de gran portada, ya que las gotas gordas que despiden no solamente apelmazan el terreno, sino que también dañan en gran manera las funciones de procreación y pueden destrozar gran cantidad de nidos junto con sus huevos y también a los recién nacidos.

En caso de realizar el riego y humidificación por nebulizadores. Estos tendrán que ser de instalación fija dentro del recinto.

Fenómenos meteorológicos adversos

Las espesas nieblas matutinas que se retiran bruscamente al mediodía, pueden ser bastante negativas. A causa de esta humedad adicional, muchos caracoles alargan en el tiempo su actividad, tanto en la comida o paseo, como en las copulas o apareamientos y en la deposición de los huevos. Si a la hora de mas insolación vertical la niebla se retira de improviso, un número importante de caracoles quedará expuesto al sol directo, que es siempre perjudicial y habrá bajas. Por esto es importante que los refugios estén próximos y la plantación no agote la sombra en todo el ciclo.

Otro factor nada bueno, es una tormenta con pedrisco. Bastantes caracoles que no se resguardan en las madrigueras en estas épocas propicias, sino que lo hacen en el envés de las hojas, son los que podrán quedar perjudicados o morir. Los que sobrevivan, es posible que tengan la cáscara rota y tendrán que reponer reservas para reconstruirla y eso deja unas secuelas de deformidad en la apreciación externa. Con la cobertura total por malla de agujero cuadrado menor de 6 mm, se evita totalmente. Hay que hacer números para ver si resulta económicamente. La gran mayoría de los caracoles siempre tienden a volver al refugio después de sus necesidades y también salen a darse los paseos después de las tormentas y nunca antes.

Manejo

El mejor manejo de los caracoles, es manejarlos lo menos posible. Cada movida es un factor de estrés, ya que se los hace babear innecesariamente con pérdida de colágeno, les estimula una reubicación con consiguiente desplazamiento y se les provoca desconchamientos más o menos importantes. Por esto, las técnicas apoyadas en alternar campos con vegetales crecidos con posterior vaciado de caracoles dentro para que coman y mientras tanto volver a sembrar y esperar que hayan comido el resto para volver a traspasarlos a la anterior zona en que el verde ya ha vuelto a crecer, no es buena práctica. Tampoco el hacer la recolección arrancándolos de su soporte a finales de Octubre y esperar una buena venta, guardándolos en sacos o cajas por algún tiempo en el almacén o en la cámara frigorífica. Si los guardamos en almacén a temperatura ambiente, mas de la mitad no habrán quedado posicionados de la manera que ellos mismos se colocarían libremente y los que han quedado atrapados en una mala postura por el peso de los otros o por estar apretados, intentarán apiñarse de mala manera. El resultado es que bastantes quedan con la boca de la concha al aire sin ningún soporte y el resto se encolan a la espalda de la primera concha que encuentran a disposición. Los primeros ya no podrán opercularse correctamente y se irán deshidratando para finalmente morir. Otros que morirán boca abajo, verterán sus líquidos creando un foco de putrefacción expansiva. El resto, deberá encolarse otra vez de unas reservas de colágeno menguadas, con lo que ya no tendrá la estanqueidad primera y con el paso del tiempo la merma de peso será notoria.

Los guardados en frigorífico a una temperatura de entre 5 y 9 ºC, se conservarán bien bastante tiempo (2 –3 meses), pero cuando se saquen de la cámara habrá que darse prisa en su consumo, porqué este brusco cambio ambiental origina bajas diarias

Madrigueras

Una buena madriguera o refugio, que es la más natural, son montones de piedras. No mayor de 50 cm de diámetro, cubierto por un retal de film de polivinilo de color negro de 40 cm de diámetro y encima de este, dos capas de retales de cartón de cajas de plátano o similares de 50 cm de diámetro. En poco tiempo y con la humedad del riego el cartón irá curvándose y cubrirá la forma del montón. Los soportes mejores, son los cantos rodados o piedras de río no mayores que la medida de un coco. Hay que tener presente que si se ha tenido mas de una semana inactiva la colonia de caracoles a causa de viento secante o temperaturas altas y secas, antes de volver a regar al regresar la normalidad, primero habrá que destapar la cubierta de plástico y cartón para asegurar que los caracoles se mojen y puedan despertarse con normalidad. De lo contrario habrá muchos perezosos que no se moverán. Si no hay movida, no habrá desarrollo y si la movida es parcial, habrá menos producción y poca uniformidad. Al día siguiente, a primera hora de la mañana, habrá que volver a tapar apenas los caracoles se hayan recogido en el refugio o bien cuando ya se pueda pasar sin peligro de aplastamientos por los pasillos. Tenga sumo cuidado en no dañarlos. Esta es una operación que se hace pocas veces a lo largo de la temporada y es laboriosa y delicada. Este tipo de guaridas, aún siendo el método más natural, tiene el inconveniente de que cuando empiezan los peligros de heladas puede no quedar todo totalmente protegido y suelen haber bajas por congelación. Algo de esto se puede evitar colocando mas cartón encima a últimos de Octubre, pero además, resulta que en las piedras es donde se pegan más fuerte y donde más tiempo nos llevará despegarlos. Incluso tendremos roturas en esta operación y posibles cortes en los dedos. Por este motivo, tendremos que empezar el despegue con más tiempo de antelación antes de la venta, con lo que forzosamente tendremos que almacenar y estar sujetos a las desventajas que ya se mencionaron casi al final del apartado de Manejo. Por otra parte deberemos trabajar al aire libre, con el frío y la lluvia, mas que probables en esta época del año.

Hay otros dos tipos de madrigueras y soportes que son más racionales.

a – Cajas de polispán sin tapa, unificadas en medida para poder apilar. Medidas: 40 - 50 cm de ancho, por 40 - 50 cm de largo y 20 cm de altura, mas o menos.

b --Cubos de pintura nuevos o de recuperación de entre 20 y 25 litros de capacidad vacíos, unificados en medida para poder apilar. Sirven lo mismo si son de material plástico que de chapa de hierro.

Soportes

Los más adecuados, son unos anillos de tubo de PVC de entre 8 y 10 cm de diámetro y de entre 4 y 5 cm de largo. También se pueden utilizar latas de conserva vacías de similares características, sin ninguna tapa o fondo. Bien limpias de grasas o residuos de su contenido.

En el caso de las cajas, esos anillos se colocarán correlativos en el fondo. Por encima de estos anillos, un retazo de malla de plástico cuyos agujeros sean de entre 40 y 45 mm de cuadro. Esta medida es suficiente para afianzar los anillos y permite holgadamente el tránsito de los caracoles. A continuación se hacen unos agujerillos en la caja por encima de la banda de malla en los que se hace pasar unas varillas de hierro calibrado de 3 mm (3 ó 4 varillas), para que no se caiga todo, al darle la vuelta de arriba hacia abajo. Estas cajas se colocan boca abajo, encima de unos listones de entre 2 y 3 cm de cuadro para facilitar al máximo la salida y entrada de los caracoles hacia su aparcamiento.

En el caso de los cubos es más sencillo. Hay que hacerle unos 7 agujerillos de 8 mm repartidos en el fondo. Uno en el centro y seis en la orilla y unos 4 repartidos por los lados y a una altura de 5 cm desde abajo. Los del fondo son para drenaje de aguas y los de los lados son para aireación. Para darle estabilidad y peso, dentro y en el fondo se hace una base de unos 3 cm de altura o grosor en arena o mejor cantos de río muy pequeños para darle estabilidad. Si se tratan con delicadeza al pasar por los pasillos, ser puede prescindir perfectamente y así se puede apurar más el contenido en anillos o trozos de tubos. Por encima del fondo interior, se colocan los anillos hasta rasar el borde sin sobrepasarlo. Normalmente serán cuatro en el fondo, otros 4 asimétricos encima de estos y otros 4 o 4,5 de la mitad de la altura de los anteriores, también lo más asimétrico posible casi rasando el borde. Encima del borde y a un lado se coloca 1 listón como los anteriores y por encima del listón una tapa de polispan o poliestireno de un diámetro mayor de entre 16 a 20 cm que el diámetro de los cubos. Esta cubierta evitará por su ligera pendiente, por su cornisa sobresaliente y por ser a modo de tapa, que no nos entre el agua de riego a molestar los caracoles cuando están descansando y también evitará un calentamiento al recipiente, por dar una sombra adecuada. Este cubo madriguera se emplaza tal cual sin darle ninguna vuelta. Por ser el poliestireno o polispan bastante poroso, es conveniente que tanto en la caja apoyada boca abajo como en el cubo boca arriba, se coloque encima de este un film de polivinilo y un cartón, más una piedra plana para que el viento no se lo lleve, encima de lo que podríamos también llamarle tejado. Así evitaremos filtrados de agua para adentro. Pero también dependerá del material. Algunos polispanes no rezuman el agua. Es cosa de ver.

Al igual que en la madriguera realizada con montones de piedra, cuando sucedan las condiciones metereológicas que adormecen a los caracoles y les predisponen para que no se despierten ni salgan, habrá que actuar de tal manera que el riego despertador les llegue con seguridad. En el caso de la caja, habrá que darle la vuelta al revés y en el caso del cubo, simplemente habrá que destaparlo. Al siguiente día, recolocar el listón y la tapa con su inclinación con la abertura de cara al mediodía y que sobresalga más por esta cara para dar mayor sombra a modo de visera.

Estas dos madrigueras descritas últimamente, tienen la ventaja de que son de poco peso, portátiles y apilables para el almacenaje conjuntamente con los caracoles tal cual.. Al apilarlas, simplemente se prescinde de los listones, que se retiran con la máxima suavidad y se guardan. Con la misma suavidad y para evitar que no se desprenda ningún caracol del soporte, se trasladan estos contenedores-guaridas al almacén y allí se apilan estos recipientes uno encima del otro. Las cajas sin ninguna tapa y sin darle la vuelta, tal como estaba en el campo La espalda de una, ya hace de tapa de la otra. En todo caso, se puede colocar un film de plástico para evitar suciedad y manchas de alguno que siempre se muere y puede infectar algo para la próxima campaña. A los cubos, como que son algo cónicos y entraría uno dentro del otro, se los tapará con la misma cubierta de porespán que ya tenían en el campo o bien otra de menor diámetro para que todo ocupe menos sitio, que servirá de base y apoyo para el siguiente. En espera del día más oportuno, los caracoles reposarán en su propio letargo y no sufrirán ningún estrés, tendremos las mínimas bajas, que serán por causa natural y también el máximo peso al vender. Tendremos asegurado trabajar bajo cubierta, sin riesgo de frío ni de lluvia. En todo caso, siempre sería bueno al apilar las cajas, que entre recipiente y recipiente se colocaran dos listones de 3 mm de grueso, suficiente para que no se escape ninguno y haya aireación ambiental. En el caso de los cubos, también se puede hacer, pero por los agujeritos laterales ya se les garantiza una mínima aireación.

Soportes no aptos

Guaridas y soportes tales como maderas, corchos, bovedillas, ladrillos y tejas, no son aptos por ser de material secante o absorbente de humedad. Plásticos y chapas que les dé directamente el sol, tampoco. En tales condiciones, unos y otros hacen la función de trampas mortales.

Competidores

Si bien es relativamente fácil descartar o eliminar a los diferentes depredadores, no lo es tanto barrar el paso a los competidores. De todas formas, nunca son tan temibles estos como aquellos. Por lo menos no nos causarán bajas cuantiosas de caracoles ni de material. Los principales competidores en cuanto a la comida se refieren, son las babosas y diversos caracolillos que nos pueden invadir el territorio. Otros, son diferentes insectos, miriápodos y escolopendras. Las babosas las podremos eliminar esparciendo cebos de granulado tratado con metaldehído al 5% dos o tres semanas antes de depositar a los alevines dentro de la granja explotación. Estos cebos se pueden adquirir en cualquier comercio o almacén de productos agrarios. Se pueden utilizar los mismos comederos. Es mejor poner poca cantidad de cebo y muchos lugares accesibles. Si no llueve, hay que regar para dar movilidad al conjunto de todas las babosas que tengamos dentro y también en cercanía fuera del recinto, para eliminar un área mas bien grande. Dos semanas después, se retirarán todas estos comederos y se limpiarán de posibles restos y se procederá a un riego intenso para neutralizar la eficacia del veneno. Tres días después de esta operación ya se podrán depositar cerca de las madrigueras a los alevines que teníamos guardados en el almacén, regando a continuación. También es de mucha eficacia mojar pienso con café o cerveza, disponiendo este cebo en numerosos cebos libres del agua de lluvia o del rocío. Otro sistema de eliminar muchas babosas es con trampas. Es muy simple. Se distribuyen encima del terreno cuadradillos de polispán

De algo menos de un palmo y las babosas siempre se refugian debajo. Después, durante el día se recogen y se les mete en un recipiente de sosa cáustica, cal viva o ácido clorhídrico o bién se las pincha con una aguja.

Cuando nos demos cuenta de que deambulan insectos dentro, podremos tratar el pienso con piretrinas naturales, las mismas que utilizan las fábricas de harinas para alimentación humana. Con este insecticida inocuo, también se eliminarán a los miriápodos y escolopendras, ya que tienen la misma sensibilidad que los insectos. Habrá que tener la precaución de no utilizar este insecticida después del penúltimo mes de actividad de los caracoles. O sea a partir del 15 de Septiembre. Aparte de atenerse bien a las indicaciones de uso por parte del fabricante, hay que extremar las medidas en cuanto a la durada de aplicación.

Depredadores menores

Además de los referidos en el apartado Generalidades, que se encuentra en cabeza de este articulado, hay que añadir algunos insectos, tales como la luciérnaga, diversos escarabajos y determinadas hormigas. Hay unas variedades de escarabajos de pequeño tamaño y con aparato bucal de punta prominente, que actúan también durante el invierno. Estos, si no se controlan, pueden destruir la mayor parte de los alevines que aún no han alcanzado los seis milímetros de diámetro. Todos estos se combaten o ahuyentan con tratamientos puntuales, con piretrinas naturales que ya utilizan las fábricas de harinas para alimentación humana, añadidas al pienso por cortos espacios de tiempo.

Miriápodos benefactores

Son los llamados cochinillas de la humedad. Se conocen por ser de un tamaño de no más de 8 mm, tienen un conjunto de unos diez anillos quitinosos de color gris oscuro, debajo de estos un par de patas por cada anillo y si se las toca, suelen enrollarse tomando la forma de una bolita. Se alimentan de materias orgánicas en descomposición, entre ellas los detritos de los caracoles y también de estos si se muere alguno. Hacen una función de carroñeo limpiador muy importante. Si se observan colonias numerosas dentro del recinto, con toda seguridad la sanidad será buena.

ARMAZÓN DE LA GRANJA

Como preámbulo, yo aconsejo que no se tenga prisa en hacer de entrada una cosa grande con una gran inversión. Primero hay que coger una experiencia práctica y después ya verá hasta donde puede llegar. Sé de algunos que después de hacer un curso y obtener un diploma acreditativo, se han lanzado alegremente con gastos millonarios a comerse el mundo y o bien porque han tratado con desaprensivos o porque estaban fuera de la realidad, han pagado amargamente la novatada.

Lo ideal es empezar con un cuadro de 10 x 10 metros. Como mucho, 10 x 20 metros de área útil. Esto no será rentable, pero dará una gran experiencia de actuación.

En el caso de que el cerrado sea de 10 x 10 metros, se harán aserrar 9 tubos de hierro de entre 6 a 8 cm de diámetro por 2 m de largo o más. Cuatro de ellos serán para las esquinas. Cuatro más, para los laterales y uno para el centro. En los de las esquinas se soldarán dos patas largas de refuerzo, en ángulo cerrado para adentro para asegurar una buena cementación y contrarrestar la tensión de los alambres laterales y superiores. Los laterales tendrán también un refuerzo del mismo largo. En vez de tubos, se puede utilizar hierro redondo de rea empleado en el hormigón de la edificación. Que no sea de menor diámetro de 25 mm. En el o los del centro se les soldarán tres hierros cortos en la parte baja y se cementará ligeramente más alto que al resto. Solo sirve de apoyo para tensar y aguantar la cubierta. En todos, hay que prever por donde pasarán los hilos de alambre galvanizado para soldarles unos pequeños ojales de sujeción.

Se procederá a excavar la zanja en cuadro y a la misma línea perimetral de los palos externos a una profundidad de 30 cm de fondo por 30 de ancho. En las esquinas, se hará un rebajado en cuadro para adentro, un poco mas allá de donde lleguen las patas de refuerzo. Lo mismo en los 4 laterales y en el del centro. Se apuntalarán todos a la misma altura, menos el o los del centro, que harán de cúspide, que se dejarán 5 cm más altos. Se procederá a cementar primero al o a los del centro de forma definitiva. Los palos externos, poniendo el nivel, la vertical tenderá a ir ligeramente para afuera, para que al tensar los alambres se corrija en la justa verticalidad. Seguidamente, a través de un encofrado que deberá quedar a filo y no sobresalir de la parte externa de los tubos, se irá deponiendo el cemento en todo el perímetro a un grosor de 20 cm y a 30 de profundidad con una varilla de hierro o rea en el centro del cemento. Todo bien alineado y rasado a la misma altura. A continuación, todos los tubos se rellenarán también con........

helixalevin@yahoo.es

La última parte, después del final del articulado Nº 3, son 38 fotografías – fichas comentadas de vegetales útiles según los casos e instalaciones con sus detalles particulares, que conforman la 4ª parte. Esta 4ª parte va impresa en CD.

FINAL DE LA PARTE 1 + 2 DE 4